Prólogo: Sabbat

La situación va de mal en peor. Cuando pensamos que la Gehena estaba llegando todo se fue al carajo, es cierto que nos apresuramos a festejar que el despertar Caín había llegado pero la hemos pagado con creces. Sabemos que aún tenemos a los malditos cazadores tras nosotros, Labhras y Andrew se han cargado unos cuantos en Mont Royal, pero no han dejado de salir, parecen cucarachas, nunca se acaban y cuando piensas que has acabado con ellos en los Muelles llegan más.

Como sea, el ganado armado es lo que menos nos preocupa en estos momentos, un par de exploradores nos dicen que han visto al bastardo de Gregory en los alrededores, ese brujo ya nos ha quitado un par de terrenos en Estados Unidos, si ha llegado aquí es porque algo trama, no nos preocupa la Camarilla, pues sabemos que el Tremere trabaja para su Clan y de los Usurpadores es de quien hay que cuidarnos. Si esto no fuera poco tuvimos un enfrentamiento con los berrinchudos Anarquistas, logramos matar a un par de ellos pero nos costó dos de las mejores manadas, ese cabeza rapada es un cabronazo.

También nos informaron de uno de esos locos de Egipto, si, un puto Setita, hemos querido correrlo de Montreal pero el muy descarado nos manda con sus esclavos a nuestros hombres hechos ceniza y agradeciéndonos la hospitalidad que el Sabbat muestra. La situación es muy difícil aquí y si el loco de Cort tiene razón, las cosas se pondrán peor.

Nuestras prioridades en este momento son: Encontrar al Giovanni perdido, parece muy importante para la Camarilla, lograr sacar al Setita de Montreal y destruir todo rastro de él, minimizar a los Camarilla y Anarcas, si es posible, lograr que ellos se destruyan entre sí mismos y por último ese ganado tan molesto que se aglomera en Mont Royal.

He mandado esta misiva solicitando apoyo y refuerzos, Montreal es el último territorio que nos queda en pie, no podemos perderlo, si los Anarcas y esos Ancianos se unen seguro nos derrotarán. Con lo cercano que está el Palla Grande necesitamos reforzar nuestras defensas, sabemos que esos hipócritas de la Camarilla no respetarán el pacto que firmamos de mala gana, si están en Montreal es porque preparan su ataque.